Los niños de El Valle vivieron una auténtica noche de Reyes a pesar del mal tiempo que quiso empañar la cabalgata que se disponía a recorrer las calles de Melegís, Restábal y Saleres.
Sin embargo, ni la lluvia paró los pies a Melchor, Gaspar y Baltasar que, pese a todo, quisieron llenar de magia e ilusión los corazones de los más pequeños, y repartirles sus esperados regalos.
Así que todos preparados, ataviados con gorros, chaquetas y bufandas, en carritos o andando de la mano de sus papás, sin perder de vista la carroza, estaban expectantes a la lluvia, pero de caramelos.
Y es que es la noche más esperada del año. Poder ver a los tres reyes magos y saber que traen los juguentes que tanto les han suplicado, y por los que han sido todo lo buenos que han podido, es sin duda el momento más esperado por los niños y niñas.
Muñecas, cochecitos, juegos… Los regalos repartidos fueron muy variados y las caras de los más pequeños irradiaban ilusión. Además, nadie quiso perder la oportunidad de fotografiarse junto a sus majestades. Al fin y al cabo, ya no volverán a verlos hasta el año que viene.
Tanto el Ayuntamiento de El Valle, como los empresarios del municipio, colaboraron para que los tres Reyes Magos llegaran a la cabalgata con las manos llenas. También los vecinos pusieron de su parte para que las carrozas y los camellos lucieran sus mejores galas en un día tan especial.
