La finca, situada en el Cortijo Buena Vista (Restábal), tiene más de 22.000 plantas de lavanda y supone un gran foco turístico y económico para El Valle
No sólo por el olor a azahar será conocido El Valle, a partir de ahora la fragancia de la lavanda también se hará notar en el ambiente. Y es que las más de 20.000 plantas de Casa Lavanda ya florecen en el Cortijo Buena Vista de Restábal. Sus dueños, Erik Stekelenburg y Femke Spiering, llegaron un día de Holanda para instalarse en El Valle. Desde hace algunos años, trabajan duro para que el cultivo de la lavanda se convierta en un gran foco turístico y de dinamización de la economía de El Valle.
Y para dar fe de ello, el parlamentario andaluz y portavoz de la Comisión de Agricultura y Pesca, Miguel Castellano, se desplazó hasta la finca el pasado fin de semana con el objetivo de inaugurar oficialmente Casa Lavanda. Un acto que también contó con la presencia del alcalde del municipio, Juan Antonio Palomino, y de otros muchos amigos y vecinos.
El grupo realizó un recorrido por los terrenos en los que crece la flor, ricos en nutrientes y minerales, donde las plantas son tratadas con especial mimo, siendo regadas con agua de manantial de sierra. Conocieron cómo se realiza la transformación de la planta de lavanda hasta convertirse en fragancia o aceite mediante la destilación, la técnica a utilizar y cuáles son las herramientas necesarias. También visitaron la zona de vivero en la que se encuentran a la venta las plantas de lavanda, así como la tienda donde pueden adquirirse infinidad de productos relacionados con la lavanda.
Gran variedad de productos
Además del cultivo de las plantas, Casa Lavanda también trabaja en la transformación a otros productos, y uno de los objetivos principales es la producción de un aceite de lavanda refinado, ecológico y exclusivo.
Pero también elaboran arreglos florales, aceites esenciales, sales de baño, aceite corporal y facial, flores secas o infusiones. Productos que, además, se pueden aprender a fabricar gracias a los diferentes talleres que se organizan en la finca. Así, bajo previa reserva, se pueden organizar grupos de trabajo para desarrollar diferentes actividades relacionadas con la transformación de la lavanda, y con degustación de té y bizcocho. Más información en www.casalavanda.es